Mi novio

Salir con un hombre me da tanto pánico, 
que preferí a un gato del jardín botánico.
Tenemos una relación de lo más abierta,
sale de casa y no cierra la puerta.

Hoy amanecí más sola que un hongo
y pegué un grito: "¿Dónde estás morrongo?".
Cuando apareció por la ventana,
 lo interrogué de mala gana
"¡Dime ya, dónde te has ido!".
Me respondió con tres maullidos.

Ahora tengo una gran duda,
quizás seas de mi ayuda:
¿Debo quedarme con el gato
o pasarme al celibato?

Comentarios