La Ignorancia

“...En español añoranza, viene del verbo añorar (sentir nostalgia), que viene del catalán enyorar, derivado asimismo de la palabra en latín ignorare (no tener conocimiento de, no saber, no experimentar, carecer o extrañar).
En esa luz etimológica nostalgia parece algo como
el dolor de la ignorancia
, del no saber…”

Fragmento de la novela La Ignorancia de Milan Kundera.



Un reencuentro.

Tras tan larga ausencia, «sus recuerdos no se parecen».

Vivieron una misma historia, que fueron dos.

Porque «nuestra memoria, la pobre, ¿qué puede hacer?

Sólo es capaz de retener del pasado una miserable pequeña

parcela sin que nadie sepa por qué precisamente ésa y no otra…».

Vivimos sumidos en un inmenso olvido, y no queremos saberlo.

Ignorancia. Doblemente ignorancia.

Y gracias a esa ignorancia: el misterio del reencuentro.

Que a su vez es encuentro. Volver a conocerse.


Comentarios

Anónimo dijo…
Me gusta.

Casi al punto tal de robártelo.

Al texto, no al recuerdo. Eso es tuyo,como el texto, pero más privado.
Gabriela Burin dijo…
Robe nomás.

Los recuerdos no se roban...se toman prestados, se arrebatan o, en el mejor de los casos,se comparten.